En la mañana de este lunes, se presentaron los alegatos de clausura en el marco del juicio por el abuso en grupo, en la localidad de Pilar. En primera instancia tomó la palabra la Dra. Shirli Tomaso en representación de la Fiscalía, quien dijo no tener duda alguna de que se trató de un abuso en grupo, y la víctima jamás prestó el consentimiento.
En su exposición, la fiscal argumentó que los acusados eran plenamente conscientes de sus acciones y que habían organizado previamente lo que le harían a la víctima que se encontraba en una situación de vulnerabilidad debido a su edad y por haber ingerido alcohol. También destacó que ninguno de los acusados mostró arrepentimiento a lo largo de los años y que algunos de ellos tenían antecedentes de cometer hechos similares contra mujeres menores en situación de desventaja.
Uno de los testimonios más estremecedores provino de la madre de la víctima que, al confirmar los atroces hechos de abuso hacia su hija, decidió tomar la valiente determinación de presentar la denuncia. La fiscal a cargo del caso enfatizó: "Esa es la única verdad de lo ocurrido. La víctima fue sometida en contra de su voluntad". Este testimonio coincidió con el de otras personas involucradas, y uno de los acusados se convirtió en una figura central en este triste episodio. A pesar de sus intentos por distanciarse de los acontecimientos, la fiscalía planteó la pregunta: "Nos preguntamos, señores jueces, ¿cómo este individuo tenía un conocimiento tan detallado de lo que sucedió en esa habitación?"
En una segunda revelación, la fiscalía abordó el caso de uno de los acusados, ya que cuenta con un antecedente vinculado a un abuso cometido contra una joven en enero de 2018. La víctima detalló los aterradores momentos que vivió esa madrugada. Según su relato, el acusado la llevó a un lugar apartado donde intentó abusar de ella. Afortunadamente, la joven logró escapar con la ayuda de terceros. No obstante, sufrió burlas y la creación de memes que agravaron su situación emocional. Una amiga de la víctima respaldó este testimonio y destacó el estado de shock en el que encontró a la víctima después del incidente.
Ambos casos, aunque diferentes en sus circunstancias, comparten un denominador común de horror y violación de los derechos de las víctimas.
En su alegato final, la fiscalía citó una resolución que subraya: "Es indebido hacer reproches a la víctima, en tanto los hechos no se cumplieron por su responsabilidad. Tan claro es que no es no, siempre es no".
En otra parte de los alegatos, Tomaso hizo hincapié en los siguientes puntos:
- Conciencia de los Acusados: La fiscal argumentó que los acusados eran plenamente conscientes de sus acciones y que habían planeado previamente los abusos cometidos contra las víctimas. Según sus palabras: "Los acusados eran plenamente conscientes de lo que estaban haciendo, no solo porque esperaban su turno para abusar de la joven, sino que observaban el accionar de uno y otro, y este accionar se prolongó con un lapso de varias horas".
- Vulnerabilidad de las víctimas: La fiscal destacó la situación de vulnerabilidad de las víctimas, señalando: "No podemos dejar de mencionar y tener en cuenta que estamos ante dos víctimas en una particular situación de vulnerabilidad, una triple condición de vulnerabilidad para ambas víctimas, por su condición de adolescente, su condición de víctima, su condición de novia".
- Edad de los acusados: La fiscal también tuvo en cuenta la edad de los acusados como un factor relevante: "También valoramos la edad de los acusados, señores jueces, siendo ello un indicador del grado de madurez de los acusados y un grado de asentimiento de ciertas características de sus personalidades".
- Arrepentimiento: Señaló que ninguno de los acusados mostró arrepentimiento a lo largo de los años y que algunos de ellos habían estado involucrados en hechos similares contra mujeres menores en situación de desventaja e indefensión.
- Conducta Inapropiada de abogados Defensores: La fiscal también mencionó la conducta inapropiada de algunos abogados defensores en el tribunal, como la filtración de información sensible en redes sociales y la falta de respeto hacia el proceso judicial.
La fiscal solicitó que los acusados fueran condenados a 18 años de prisión de efectivo cumplimiento por el delito de abuso sexual con acceso carnal calificado por haber sido cometido por dos o más personas y agravado por la participación de un menor de edad. Además, pidió 20 años de prisión para uno de los acusados por abuso sexual simple, quien cuenta con un antecedente previo.
El alegato de la Defensa
Finalmente fue el turno de los abogados defensores, quienes presentaron sus alegatos, destacando una serie de argumentos y cuestionamientos en busca de la absolución de sus clientes.
Algunos puntos destacados:
- Cuestionamiento a la detención domiciliaria: Uno de los principales argumentos de la defensa fue el cuestionamiento a la detención domiciliaria de uno de los acusados, argumentando que sus problemas de salud justifican esta medida. Se hizo hincapié en que la situación médica ha mejorado y controlado desde el inicio del debate, y que el tribunal podría garantizar el tratamiento médico necesario durante la detención en su domicilio.
- Memoria selectiva: La defensa cuestionó la memoria selectiva de la víctima, señalando que no recordaba detalles claves de los hechos, como quién inició los actos de seducción o cómo ocurrió la salida de la habitación. Argumentaron que esta falta de recuerdo crea dudas sobre la veracidad de su testimonio.
- Necesidad de peritajes médicos: La defensa subrayó la necesidad de contar con la opinión de un médico forense competente en casos de este tipo, particularmente para determinar si hubo consumo de sustancias que afectaron el estado de la víctima. Se mencionó que el tiempo transcurrido entre el evento y la denuncia podría haber limitado la efectividad de los análisis toxicológicos.
- Reclamo por la participación de un médico neurólogo: La defensa planteó la posibilidad de que las lesiones o síntomas de la víctima podrían estar relacionados con un accidente posterior al evento en cuestión. Se argumentó que la participación de un médico neurólogo sería necesaria para esclarecer este aspecto.
"No creemos que se trate de una falsa denuncia, porque estas tienen como objetivo perjudicar a los acusados, y acá lo que pasó es que la menor se enteró que podría haber fotos y videos de lo sucedido y que denunció al verse sobrepasada por la vergüenza", expresó el Dr. Lovaiza. Sumado a esto, el Dr, Barceló manifestó la desconfianza en el relato de la víctima ya que denunció dos meses después y además sé preguntó: "Si ella sabía que el alcohol le generaba somnolencia, al ingerir, ¿no es ella también responsable de lo sucedido?.
Todos los abogados coincidieron en el pedido de la absolución para cada uno de los acusados, y de lo contrario, de haber alguna pena de prisión efectiva, que se mantengan las prisiones domiciliarias.
Sentencia:
Si bien aún no hay horario estipulado, la misma se dará a conocer el día miércoles.
