Por Dra. Valeria Brunone
La columna de hoy, nos convoca para este nuestro tercer encuentro con el lector, con un tema de fundamental importancia y que lo constituye la Fauna Silvestre Nativa que forma parte de la biodiversidad protegida por mandato Constitucional, así como por Leyes Nacionales, Provinciales y Tratados Internacionales, en especial la CITES y el Convenio de Diversidad Biológica.
Tengamos presente que la situación actual en la que se encuentran muchas de las especies de Fauna Silvestre Nativa, están en peligro crítico de extinción o en estado de vulnerabilidad (UICN-Listas rojas). Las causas principales son: la pérdida y degradación del hábitat por la deforestación para la agricultura y ganadería intensiva, cambios de uso del suelo, la sobreexplotación de la flora y la fauna, la caza ilegal, el tráfico de fauna silvestre de especies vivas o de productos y subproductos derivados, la contaminación, el cambio climático y la introducción de especies exóticas invasoras que afectan y desplazan a las nativas.
Todas estas causales impactan de manera negativa en la Fauna Silvestre y hace que aparezcan ejemplares en zonas urbanas o que los encontremos heridos en campos al destruir sus hábitats naturales como lo constituye la pérdida del monte, transformándolos en ecosistemas artificiales como son los con cultivos de maíz, entre otros, perdiendo sus madrigueras y obligando a la especie adaptarse a ese paisaje intervenido por el hombre, sufriendo además, accidentes que le ocasiona algún daño a su integridad física siendo la mayoría de las veces irreparables para poder ser devueltos a su hábitats naturales. Aquí, otro de los casos de intervención negativa que realiza el ser humano, sin tener en consideración a las demás especies de Animales.
Esta situación se replica en muchas provincias de Argentina en donde la especie de Puma Concolor produce mayores intervenciones también con el ganado o los animales de granja (ataque de Puma por falta de sus presas silvestres por el cual se alimentan naturalmente) o búsqueda de refugio (por depredación del monte) en campos cultivados con maizales al modificar el monte natural por campos cultivados. Como consecuencia de esta intervención antropogénica, muchas
crías de Pumas resultan heridas al pasar las trilladoras o cosechadoras como pasó en el mes de mayo, en la localidad de Pilar, provincia de Santa Fe, quedando esa cría en condiciones en la que no puede valerse por sí mismo, debiendo darle asistencia cuando la situación así lo amerite.
Ante esta situación, lo primero que debemos hacer es dar comunicación a la autoridad competente de cada jurisdicción para operar con Fauna Silvestre, que son los autorizados en asistir y trasladar la fauna silvestre (brindando información a la sociedad civil, números de contacto a disposición de la comunidad) para así luego poder seguir lo establecido en la normativa nacional y provincial para poder así ser derivados a un centro de rescate y rehabilitación (los centros de rescate y rehabilitación de fauna silvestre son instituciones dedicadas a la conservación de la biodiversidad fuera del ámbito natural), para darle la asistencia necesaria que requiera la situación del Animalito y acorde a la especie.
Las alternativas luego de haber sido asistido por los humanos en los Centros de Rescates y Rehabilitación que deben estar especializados en Fauna Silvestre, cumplimentando con un conjunto de normas y estándares comprendidos en diferentes protocolos de actuación con veterinarios, biólogos y demás profesionales que lleven adelante la recuperación de cada especie allí alojados para que en lo posible, puedan ser devuelto a su hábitat natural y si ello no es factible, permanecer de por vida en un centro de reserva que cumpla con todas las normativas internacionales para la conservación “ex-situ” y así brindarle la mejor calidad de vida en la que deberá pasar en su cautividad.
Es importante destacar que el Centro de Rescate y de Rehabilitación a donde se deriven los Animalitos de Fauna Silvestres necesitan contar con la asistencia de veterinarios especializados en fauna silvestre siendo su función principal la de recuperar sanitaria, física, psíquica y conductualmente a animales silvestres, además este “centro”, debe formar parte de la Red Federal de Centros de Rescate y Rehabilitación- Resolución 183/21- creada por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación e inscriptos en el Registro único de Operadores de Fauna Silvestre y cumplimentar con toda la normativa nacional, provincial, internacional para su correcto funcionamiento, es decir, contar con capacidad técnico-administrativa capaz de responder a los requerimientos de cuarentena/internación, rehabilitación, readaptación y liberación de los animales. y ser fiscalizados por autoridad competente en caso de irregularidades con el manejo de los Animalitos de Fauna Silvestres allí alojados bajo la órbita de políticas de bienestar animal y el combate al tráfico ilegal de Fauna Silvestre.
Ponemos en consideración la necesidad de articular de manera eficiente los distintos organismos del estado Provincial, Municipal y las autoridades competentes (Los Pumas, Policía Ambiental, Brigada de Control Ambiental) para el mejor desenvolvimiento en esta temática en los casos de decomisos por mascotismo, tenencia ilegal de fauna silvestre, asistencia y traslado de la misma por accidentes, ya que recordemos que estamos en presencia de Animales No Humanos,
por lo tanto son seres sintientes y con reconocimiento de sus derechos fundamentales: a la vida, la libertad e integridad física.
Asimismo, debemos tener en consideración, que por disposición nacional es de: interés público, el cuidado y conservación de la Fauna Silvestre teniendo todos los habitantes de la Nación, el deber de protegerla. Por tales motivos, es que dichas autoridades en todos los niveles de su responsabilidad deben velar y procurar el bienestar de los Animales que son asistidos por los seres Humanos.
Necesitamos como humanidad buscar un nuevo modo de relacionarnos con la Naturaleza para así mitigar la pérdida de Fauna Silvestre y prevenir futuros daños tanto para los Animales como para las personas y así poder revertir estos hechos que tanto sufrimiento ocasionan a las diferentes especies de Fauna Silvestre y cumplimentar con el ODS15 “Gestionar sosteniblemente los bosques, luchar contra la desertificación, detener e invertir la degradación de las tierras, detener la pérdida de biodiversidad para 2030”. Todos somos responsables, en los diferentes estadios de: cuidar, respetar, proteger la Naturaleza, sus Ecosistemas y la Fauna Silvestre.
