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Policiales

Caballos sueltos en Rafaela: cumbre en la Jefatura

Participaron las diferentes fuerzas de seguridad que conforman lo que se conocía como Comando Unificado. ¿Se vienen cambios para darle una solución?
Agrandar imagen El encuentro se realizó en la Jefatura de la URV
El encuentro se realizó en la Jefatura de la URV Crédito: RN
Jonatan Almaraz Funes

Por Jonatan Almaraz Funes

En la mañana de este martes, la Jefatura de la Unidad Regional V de Policía fue el escenario de una cumbre local por la seguridad, de la que participaron representantes políticos y de las fuerzas de seguridad que actúan en la ciudad; y donde uno de los temas convocantes fue la problemática de los caballos sueltos en Rafaela.

Si bien no trascendieron mayores detalles de lo conversado puertas adentro, algunos de sus participantes fueron consultados por Rafaela Noticias, que aguardó en el lugar por su salida, aunque prefirieron no hacer declaraciones oficiales. Sin embargo, con el grabador apagado, comentaron que entrará en vigor una nueva forma de trabajo, donde la articulación entre distintos estamentos será fundamental, debido a la complejidad del tema.

 

Siempre dentro de la zona gris del “off the record”, la actuación primaria recaerá en el municipio, vía Guardia Urbana Rafaelina, que es quien centraliza la mayor cantidad de denuncias por equinos sueltos en la vía pública. “La GUR va a seguir respondiendo, pero no es suficiente” comentó un funcionario que circula por el 5to piso ante la consulta de éste portal.

Una vez constatada la infracción, se intimará al presunto dueño del animal. “Presunto” porque, a diferencia de los “legales”, los caballos que pululan por la cuidad no llevan marcas identificatorias, por lo que llegar a los propietarios es prácticamente imposible.

Los vecinos te dicen que el dueño es tal, pero legalmente es difícil de probarlo porque no tienen marcas. Te van a decir, «ese caballo no es mío» y ahí se complejiza actuar legalmente” comentaron quienes están en el tema.

Retomando. Tras la primera intervención municipal, deberá entrar en el partido el Ministerio Público de la Acusación, quien ordenará a la Guardia Rural “Los Pumas”, el traslado de los equinos a los corrales municipales y luego a su destino final. “Siempre bajo orden de la Justicia” remarcaron.

Un problema de larga data

Los caballos sueltos son un problema y requiere una solución definitiva. Pero no se puede cargar las tintas contra una gestión que recién inicia. La problemática es de larga data y excede incluso al municipio, que durante la anterior administración había esbozado algún intento de solución con la construcción de corrales y el reclamo al MPA. Un año después, nada cambió.

Un informe elaborado por el periodista Julio Armando, daba cuenta, en diciembre del año pasado, por ejemplo, que en barrio 2 de abril andan grupos de a 6 o 7 caballos juntos, en total unos 30, que pertenecen a unas 5 familias que tienen media docena de animales cada una. En barrio Mora circulan unos 12 equinos, en tanto otros son atados en los terrenos donde no hay construcciones, en la plaza o en la cancha de fútbol para que se alimenten. Son traídos del barrio Monseñor Zaspe, según comentaron los vecinos. En Av. Italia, antes de llegar a Corti, se ubica un predio rodeado con alambre por un particular, el cual encierra los caballos allí (vecinos se quejan de los olores) y cuando no queda pasto, los larga por el barrio. Las familias que tienen caballos en Barranquitas los cruzan a un terreno ubicado en Woodgate y Rodriguez en barrio San José, pero en ocasiones los animales se escapan y caminan por las calles y veredas de este último sector. De allí llegan incluso a cruzar el Bv. Lehmann hacia barrio Los Arces o hacia un campo detrás de Apadir. En Los Arces, los animales también son dejados en ocasiones en baldíos, y de allí empiezan a deambular.

Algunos equinos ya deambulan en tropillas por la ciudad.
Algunos equinos ya deambulan en tropillas por la ciudad.

El reclamo en todos los sectores mencionados se repite: los animales rompen bolsas, ensucian las calles y veredas, generan riesgos en el tránsito cruzando avenidas, a veces galopando porque son corridos por los perros, y “de milagro todavía no hay que lamentar una tragedia”.

Los corrales municipales lucen vacíos, algunas fuentes consultadas por RAFAELA NOTICIAS aseguran que la Justicia no está actuando, y que falta esa "pata" para que el proyecto original funcione. Es decir, que los fiscales determinen el secuestro de los animales que andan en la vía pública. Pero otros señalan que, si eso pasa, luego en los corrales municipales habrá que poner cuidadores o custodia para que los dueños de los animales no vayan a buscarlos de noche. También la pregunta que surge es, ¿si se secuestran decenas de caballos, ¿quién se hará cargo del mantenimiento de los mismos?

Una curiosidad que se da en Rafaela, es que los equinos son prácticamente utilizados como "mascotas", a diferencia de lo que pasa en ciudades más grandes donde se los usa para tirar carros. "Acá es una cuestión cultural", declaró un integrante de una fuerza de seguridad. Por lo que su propuesta es que uno de los trabajos a realizar sea el educativo. Pero está claro que además de eso, se necesita una intervención con resultados más rápidos en el tiempo.

El “correveidile” de siempre

Algunos comentarios “de pasillo” habían deslizado la posibilidad de que, a no ser que se trate de un caso de peligro extremo, la Guardia Urbana no intervendría más en estos reclamos, dejándole la responsabilidad a “Los Pumas” vía Fiscalía para que se hagan cargo de los caballos sueltos, algo que finalmente fue tachado de falso por quienes toman decisiones en la materia.

 

 

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