Un documento dado a conocer hace unos días por el Observatorio de Seguridad Pública y al que tuvo acceso RAFAELA NOTICIAS, muestra cuál es la situación carcelaria en Santa Fe. El informe toma el reporte del último día hábil del 2022, tanto del Servicios Penitenciario como de las distintas sedes policiales que hay en la provincia.

En el año 2022 se observa un incremento del 13,1% en la cantidad total de personas privadas de libertad (9.350) en todo el territorio de la provincia en comparación con el año 2021 ( donde habían sido 8.270 los detenidos). Lo que da un promedio de 263 personas detenidas cada 100 mil habitantes. El año pasado fue en el que más personas presas hubo en la historia santafesina.

Más de una de cada diez de las personas privadas de libertad en el año 2022 estaban alojadas en sedes policiales (11,6%), lo que representa 1.089 internos, mientras que el restante 88,4 % se encontraba en espacios penitenciarios (8.261 detenidos)

Para el año 2022, menos de la mitad de las personas privadas de libertad en la provincia de Santa Fe tanto en prisiones como en comisarías no tenían condena firme (44%). Esta proporción es muy semejante a la del año 2021 (44,7%). Ahora bien, cuando uno diferencia entre los que están detenidos en prisiones, de los que se encuentran en sedes policiales, los porcentajes son totalmente opuestos. Casi nueve de cada diez personas detenidas en alguna sede policial no tienen condena firme. Observándose de esta manera que en espacios policiales hay una presencia mucho mayor de personas privadas de libertad sin condena en comparación con los espacios penitenciarios. En estos últimos para el año 2022, casi cuatro de cada diez detenidos no se encontraban condenados.

Para el año 2022 se registró una sobrepoblación de 1887 personas en dependencias del Servicio Penitenciario, lo que implica un exceso del 29,6% sobre la capacidad disponible. Esta situación tiene lugar en nueve de los catorce espacios a cargo de esta institución. Se destaca por ejemplo la Unidad Penitenciaria de Coronda con 2.189 internos, cuando la capacidad es de 1456. Es decir, 733 más, representando un 50,3 por ciento superior a las vacantes existentes.

El problema de la sobrepoblación es aún mayor en los espacios policiales. La cantidad informada de plazas con las que cuenta la Provincia para alojar personas de manera transitoria es de 733. Sin embargo, se encontraban para finales de 2022 un total de 1089, lo que significa una sobrepoblación de 356 personas, que representan un 48,6%. En este sentido, la Alcaidía de la Unidad Regional V de Rafaela, presentaba a fin de año pasado un 113 por ciento superada su capacidad de alojar internos. Hay lugar para 48 y se encontraban detenidos 98 presos.

La mayoría de los detenidos son hombres. El 3,8% de la población privada de libertad en prisiones eran mujeres; por su parte, 9 personas se percibían mujer trans o varón trans. El porcentaje en cuanto a género, es similar para quienes están alojados en sedes policiales.

Casi la mitad de las personas que se encontraban privadas de libertad en las prisiones santafesinas para diciembre de 2022 eran jóvenes de entre 18 y 30 años. Si se considera a las personas de entre 31 y 35 años, la proporción sobre el total pasa a ser de casi dos tercios.

Tomando como base la cantidad de personas que se encuentran condenadas en las prisiones santafesinas, acumulando todas las unidades penales, se observa que casi un cuarto de las mismas fueron declaradas reincidentes. Dos tercios de ellas, por su parte, están cumpliendo su primera condena. Es importante tener en cuenta que en una porción importante de casos no se cuenta con este dato (12%).

En casi cuatro de cada diez de las personas privadas de su libertad en las cárceles santafesinas la calificación penal “robo” aparece entre los delitos que justifican su situación (35,6%). En más de dos de cada diez, por su parte, figura homicidio doloso (22,2%) y en una proporción un poco menor (17,2%) algún delito contra la integridad sexual. En un 15,9% de las personas privadas de libertad el delito de portación de arma de fuego está entre las calificaciones que justifican la decisión judicial. Un 6,6% representan aquellas personas que están privadas de su libertad al menos por alguna infracción a la Ley Nº 23.737 (narcotráfico)

Casi la mitad de las personas que están en las prisiones de la provincia lo están con penas de 6 años o menos de prisión (48,1%). Poco menos de uno de cada cinco, por su parte, tienen una pena de entre 6 a 9 años (17%), mientras quienes están condenados a entre 9 y 12 años de prisión representan el 12,9%. Además, dos de cada diez de estas personas (20%) cumplen penas de más de 12 años. Entre este grupo se tiene en cuenta a la población penal condenada en las cárceles provinciales con una pena de prisión perpetua, quienes constituyen el 2,5%.

Poco más de un cuarto de las personas privadas de libertad en prisiones santafesinas -26,3%- para diciembre de 2022 había ingresado durante ese año. El 15,8%, por su parte, se incorporó en 2021 y el 12,2% en 2020. Esto se traduce en que poco más de la mitad de las personas que se encontraban en prisiones santafesinas para diciembre de 2022 había sido privada de su libertad en alguno de los tres últimos años del período indicado.