Contexto y Acuerdo de Congelamiento:
Desde principios de noviembre, las empresas han implementado dos rondas de incrementos, promediando alrededor del 15% durante la primera semana y el 12% durante la segunda. Este ajuste es resultado, según fuentes empresariales, de la necesidad de recomponer márgenes después de 70 días de congelamiento de precios en medio de la inflación más alta en tres décadas. Además, se suma la dificultad de acceso a divisas para pagar importaciones y la incertidumbre sobre el tipo de cambio post elecciones.
Diálogo y Expectativas:
El diálogo entre el Gobierno y las cámaras farmacéuticas busca establecer medidas para encauzar la situación. Las dependencias involucradas son Comercio y el Ministerio de Salud de la Nación. Las cámaras convocadas incluyen a Cilfa (laboratorios nacionales), Caeme (laboratorios extranjeros), y Cooperala (cooperativas). La intención es escuchar a las cámaras y buscar un esfuerzo compartido para abordar la coyuntura, similar a situaciones previas, como los faltantes de insumos médicos.
Justificación Empresarial:
Empresas farmacéuticas han destacado la necesidad de la corrección de precios para hacer frente a una situación económica y financiera compleja que amenazaba la sustentabilidad de las compañías. Argumentan que el aumento refleja el impacto de la evolución de costos y las variaciones cambiarias. Sin embargo, cada firma evalúa internamente sus incrementos basándose en la financiación de importaciones, costos de insumos y laborales.
Resultados Esperados:
Aunque no se ha confirmado la retrotracción de precios, el diálogo podría influir en acuerdos de precios futuros. La dependencia del resultado del balotaje entre Sergio Massa y Javier Milei es evidente, ya que podría determinar la dirección de las políticas económicas y los acuerdos de precios en diversos sectores, incluido el farmacéutico. El desafío radica en lograr un equilibrio que considere las necesidades de las empresas y garantice accesibilidad a los medicamentos para la población.
