El estado de mantenimiento que presenta la Terminal de Ómnibus de la ciudad es materia de controversias y reclamos permanentes. El tema fue tratado la semana pasada en el Concejo durante la exposición informativa del jefe de Gabinete, Marcelo Lombardo, y además hay un importante convenio pendiente de ratificación por parte del cuerpo legislativo, donde los tiempos urgen: Nación promete 112 millones de pesos para aportes, y ya firmó un convenio con la Municipalidad, con el fin de ejecutar obras de recuperación y modernización en el edificio, pero los concejales quieren saber qué va a aportar el sector privado que tiene una concesión por 30 años para ocupar y explotar la Terminal, del cual apenas se ha cumplido algo más de un tercio del plazo.

En la jornada del lunes los concejales cumplieron con el trámite de darle despacho a algunos temas menores en Comisión de Gobierno, relacionados con reclamos puntuales. El más importante es un proyecto de ordenanza para prorrogar hasta diciembre de 2023 el régimen temporal para la contratación directa de alimentos, insumos, bienes y servicios, principalmente destinados al área social, dado que persisten las condiciones que en su momento sirvieron como fundamento para tal régimen.

Preguntas e incógnitas

Sin embargo, en la agenda previa a la sesión del Concejo sobresale el encuentro con los concesionarios de la Terminal. Entre los concejales, sobre todo en la oposición, prima la opinión de que hasta ahora los privados han hecho poco y nada para mantener a la Terminal en condiciones y que el estado deplorable que ofrece el complejo viene de antes de la pandemia, que desplomó los ingresos del concesionario privado.

Ahora, cuando la inflación mensual se "come" los recursos prometidos por la Nación, urge tener respuestas sobre cuál es el rol que está cumpliendo el concesionario antes de poner en marcha un plan de inversiones que tiene al Estado poniendo dinero y a los privados cobrando los cánones por el uso de los espacios de la Terminal.

El proyecto de esas inversiones -cuyo detalle no fue suministrado aún- incluiría desde arreglos en los techos hasta ampliaciones en el área de encomiendas, así como una modificación en las áreas de estacionamientos y en los accesos y circulación en torno a la Terminal. Pero la pregunta que se hacen los concejales es qué van a poner los privados, si es que están dispuestos a invertir.

A su vez, el concesionario tiene sus propios argumentos. Por ejemplo, que la Municipalidad utiliza a la Terminal como playa de los minibuses y que también utiliza algunas oficinas. Todo eso tiene un valor, que por ahora nadie conoce. En torno a todas esas dudas girará la reunión de este martes y habrá que ver con qué cartas se presenta cada uno.