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El programa malvinero Sí Juro “para que la causa Malvinas no se olvide”

Gustavo Capretti es uno de los cientos y cientos que no dejan morir el tema Malvinas a través de su programa Si Juro. En la nota, lo que hace.
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Crédito: Gustavo Capretti - Sí Juro
Redacción Rafaela Noticias

Por Redacción Rafaela Noticias

En el marco del 42º aniversario de la gesta de Malvinas, Rafaela Noticias dialogó con Gustavo Capretti, quien desarrolla cotidianamente el Programa Malvinero llamado Sí Juro. En la entrevista, comenta de qué se trata, cómo es la relación con los veteranos y las sensaciones de haber tocado suelo malvinense.

El programa está enfocado en malvinizar a través del relato de los veteranos de guerra de Malvinas, en primera persona. “Arranca en pandemia. Nosotros viajamos mucho en moto y por ahí hacemos un programa más entre nosotros, los moteros, de viajes. Nos invitan a Salta, a un acto de Malvinas, porque siempre estuve con el tema Malvinas, y se da que se viene la pandemia, nos cierran todo, y empezamos a hacer -un 2 de abril- homenaje a los veteranos. Se extendió y hoy estamos arriba de los 200 y pico programas, casi 300”, inició explicando Gustavo.

Sin embargo, dijo que hubo un parate grande “porque por ahí cuesta, el veterano por ahí no está siempre 100% disponible”. Muchas veces, contaba Capretti, cuando pactaba una nota, algunos de ellos se bajaban por cuestiones personales, el no querer hablar.

Pasaron años para que los veteranos pudieran contar sus vivencias, anécdotas y amistades de lo que fue la guerra: “Estuvieron silenciados, en ese entonces ellos habían firmado documentos que no podían hablar de Malvinas, que era algo que iban a ser sancionados, que iban a ser metidos presos, un montón de cosas, pero les habían hecho firmar un papel de que no se podía hablar”.

A pesar de eso, comentó que se están soltando, pero cuesta mucho. Algunos optan por no volver a esa época, “de las miserias de la guerra y por ahí tenés mucha gente que entre ellos les decía ‘hablá, contá tu historia, nos estamos yendo de a poco’, y eso es triste”.

“Ellos son los San Martín, los Belgrano, que tenemos hoy en vida. Hoy por hoy, te puedo decir, si San Martín cruzó la cordillera, aquí estaría hablando con los granaderos, en esta época (…) Yo siempre les digo, ustedes son los que dieron lo mejor en Malvinas, en muchos hasta la vida, y por ahí está bueno que cuenten el testimonio para concientizar a la gente, para que la causa Malvinas no se olvide, que eso es fundamental”, afirmó.

Gustavo Capretti - Programa Malvinero "Sí Juro".

Horas previas a la entrevista realizada con Capretti, se anunciaba que no iban a realizar el tradicional desfile de los Veteranos de Guerra. En ese sentido, declaró: “Hoy, a 42 años, es una vergüenza que no tengamos un desfile para nuestros veteranos de guerra, el cual, yo sé que implica gasto, pero cuántas cosas se gastan en este país, y no se rinden, y homenajearlos a ellos, que se nos están yendo de a poco, sería fantástico”.

Al tener una vicepresidente donde el papá fue veterano, “pensaba que este año iba a ser distinto, y la verdad, una desilusión terrible”.

“Entonces, el verdadero reconocimiento al pueblo argentino hacia los veteranos, sería un gran desfile, y como siempre digo, si te cruzas con un veterano de guerra, si tenés un veterano de guerra frente a tu casa, o al lado de tu casa, cruzá, te da un abrazo y deciles gracias por haber defendido la patria”, manifestó.

Gustavo es empleado de casa de adolescente desde hace 19 años aproximadamente, pero Malvinas siempre fue su pasión, desde los 16 años. Cuando vuelve de la Fuerza Aérea Argentina, se armó el conflicto de Malvinas y se presentó a la segunda brigadería.

“Sí, pero necesitas la firma de tu padre”, le habían respondido y relató: “Le digo a mi mamá, ‘mirá, me quiero volver a la Fuerza Aérea, porque bueno, pasó esto de Malvinas’, me dicen no, ni acá, qué sé yo. ¿Y qué pasó? Bueno, cuando termine la guerra, te voy a enterar de dónde está tu hijo. Y me fui” (a Paraná).

Recordó los trenes que llegaban cargados de vehículos militares y soldados. Con un termito, cebando mate, se fue metiendo de a poquito “hasta que me dieron una varilla de hierro y me dieron los tanques para ver si pasaban adentro del túnel. Esa fue la historia”.

Luego, volvió a remarcar que se están yendo lamentablemente [los veteranos], “que pasaron un montón de cosas, de desmalvinización, de que no les daban trabajo, no tenían ningún beneficio, y yo lo viví en Rosario cuando era gendarme, verlos en los colectivos, en los trenes cuando estaba en Campo Mayo, vendiendo estampitas para poder llevar su plato de comida”

Para mucho de ellos, Gustavo es su psicólogo, le dicen que nunca se calle y deje de hacer el programa, “porque sos nuestra bandera”. Contó que no termina solo en la nota, “porque te llamo para tu cumpleaños, te llamo para ver cómo estás, y te digo, ‘che, mirá, ando por Chaco, nos encontramos y nos vemos’ (…) yo me tomé el compromiso de aliviar un poco esa mochila de cada veterano”.

Y continuó: “Ellos son una hermandad, la guerra los hizo muy hermanos. Siempre decimos, ‘ustedes hablan un lenguaje especial que solamente ustedes entienden’”.

Cuando llega el 2 de abril, “ellos caen” porque vienen los recuerdos, los fantasmas de la guerra, pasan un montón de cosas por su cabeza y “en esos momentos es donde uno tiene que estar apoyándolos (…) el veterano todos los días de su vida tiene los fantasmas de la guerra, todos los días de su vida se va a acordar del compañero que murió al lado de él”.

Más adelante, dejó un mensaje a la comunidad, el de siempre recordarlos como héroes, “no como pobrecitos (…) ellos no fueron ningunos pobrecitos, son terribles leones”.

Viaje a Malvinas

Capretti tuvo la oportunidad de ir a las Islas Malvinas el 11 de noviembre de 2023 por primera vez y relató que se movían a pie para sentir lo mismo que nuestros soldados, pero también porque fueron con un veterano del Regimiento 25 y él buscaba su posición en la zona de la playa, entre Puerto Argentino y el faro. Finalmente, no pudieron encontrarla debido a que la pista de aterrizaje fue ampliada y se taparon muchas de las posiciones.

Crédito: Gustavo Capretti
Crédito: Gustavo Capretti

“Encontramos muchísimas posiciones intactas, muchísimo material, desde cepillos de dientes, pasta de diente, crema de afeitar intacta. Osea, 42 años. Yo destapo una pasta de diente y aprieto el pomo y sale como si fuese hoy (…) cáscara de papa, las avutardas”, contó.

Sobre el clima, lo describió tal cual recuerdan los combatientes: “Tenés lluvia, tenés frío, tenés nieve, cambia totalmente, al rato volvés a tener sol. A mí me mató, yo tuve 40 de fiebre, fui hasta el pie de Monte London y me volví porque llovía mal y frío mal, habíamos ido a Monte Kent, donde cayó el helicóptero de gendarmería”.

Crédito: Gustavo Capretti
Crédito: Gustavo Capretti

Luego de atravesar esa situación, se dirigieron a Darwin, donde se encuentra el cementerio de los caídos en combate y se encontraron con el cielo celeste y blanco. Uno que se encontraba con él había dicho: “¿Sabes loco? los ingleses nunca van a poder mirar para arriba, porque tienen nuestra bandera”, y, al mirar al cielo, “parecía más argentino que nunca”.

Finalmente, realizó un pedido a la sociedad:

“Este 2 de abril, en nombre de todos, y perdón que me emocione, en nombre de todos los que quedaron en Malvinas y todos nuestros veteranos de guerra, pongan la celeste y blanca en su vehículo, en el frente de tu casa, ponele a tu pibe una escarapela, porque no tenemos que olvidar nuestros héroes, como te dije recién, son los San Martín los Belgrano que tenemos en vida”.

 

Islas Malvinas 2 de Abril

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