Agustín Canapino no tuvo una buena experiencia en su cuarta participación de la temporada de Indy Car, al finalizar el domingo penúltimo entre 27 participantes en el autódromo del condado de Barber, en los Estados Unidos, aunque a su favor estuvo dado el hecho de que pudo completar este recorrido en un tipo de pista como la de esta oportunidad.

Es que anteriormente el arrecifeño de 33 años había competido en las dos primeras en circuitos callejeros y la tercera en un óvalo, por lo que hoy “debutó” en este circuito de monoplazas.

Pero a pesar del 26° puesto, en la columna del haber le quedó a Canapino el hecho de haber completado sin inconvenientes las 90 vueltas del trazado de este autódromo de Kansas.

Claro que ese “sin inconvenientes” tuvo que ver con la respuesta de su máquina, aunque no tanto con su desempeño, ya que nunca le “encontró la vuelta” a los tiempos de aceleración y frenado de su vehículo, lo que en algún momento le llevó a decirles a los miembros de su equipo Juncos Holliger Racing Team que no podía hacer más “porque los de adelante van demasiado rápido”.

Todo lo contrario ocurrió con su compañero de equipo, el británico Callium Llot, que finalizó en la mitad de las posiciones que él, 13ro. en una prueba que ganó el neozelandés Scott McLaughlin, escoltado por el franco-suizo Romain Grosjean, mientras que el australiano William Power concluyó tercero.

La próxima competencia de la temporada representará un gran desafío para el argentino, ya que serán nada menos que las emblemáticas “500 millas de Indianápolis”, que tendrán lugar el domingo 28 de mayo próximo.